“Para que la bruja no me coma” fantasía y miedo de los niños al infanticidio Dorothy Bloch

UNIVERSIDAD AUTONÓMA DE DURANGO

CAMPUS ZACATECAS

Maetria en psicología clínica

Trastornos psicopatológicos I

 

 

 

 

RESUMEN

 

“Para que la bruja no me coma” fantasía y miedo de los niños al infanticidio Dorothy Bloch

Catedrático: Mtra. Erèndira Hernández Sánchez

Alumno: Martha Rodríguez Landa

                                                                                         

 

 

 

Introducción

La autora Dorthy Bloch  nos narra en este libro las experiencias e investigaciones  sobre las fantasías y miedo al  infanticidio de los niños.

En este libro  comenta que los niños tenían miedo a ser asesinados   por sus propios padres, y en algunos pacientes adultos   este miedo aún permanecía  en el subconsciente y  en los  niños en la superficie, lo cual le permitía detectarlo en la primera sesión lo presentaban en sus dibujos  “la ciudad peligrosa”  “cielo peligroso, un niño de cinco años miraban las nubes y decía que se derrumbaran, otro niño de cinco años decía que tenía dos lápices en los ojos, un niño de seis años que se que al sentarse   a la mesa junto a la terapeuta, reacciona con un risa irónica diciendo “para que la bruja no me coma.

Hasta que empecé a tratar niños, mis conocimientos de las fantasías no iban más allá  de su función de satisfacer unos deseos. Generalmente pensamos que las fantasías son para complacencia de la imaginación. Superar el aburrimiento del momento y entrar en un mundo voluptuoso encantamiento, dejar atrás nuestras limitaciones y ponernos un manto de poderes infinitos: todo esto lo asociamos con la fantasía, este concepto  coincide con la descripción de Freud como “gratificación imaginaria de deseos eróticos grandiosos y ambiciosos, como una especie de parque natural, donde a todo puede crecer y despegarse a voluntad.

Lo que la autora encontró en el tratamiento de los niños tenía poco que ver con los deseos eróticos o el placer abundaban las bestias de apariencia terrorífica, las brujas crueles y los monstruos que perseguían a sus víctimas salvajemente, así como las metralletas los ahorcados en los árboles y los ríos de sangre,

En casi todos los casos, la fantasía representaba un intento del niño de defenderse contra el miedo a ser asesinado. Mellaniee Klein analista infantil escribió “estamos acostumbrados a ver el terror de los niños a ser devorados, o cortados a ver el terror a ser rodeados y perseguidos o hechos trozos, o su terror a ser rodeados y perseguidos por figuras a amenazantes como un componente  normal de su vida….”  Ella tenía claro el origen del miedo y decía “no me cabe ninguna duda, por mis observaciones analíticas, de que las identidades que se ocultan detrás de estas figuras imaginarias y terroríficas son los propios padres, ni de que esas formas horribles reflejan los rasgos de su padre o su madre por distorsionada o fantástica que pueda ser la semejanza….”  Las implicaciones del terror en esas fantasías eran tan difíciles de afrontar y definir explícitamente en los años treinta como lo son ahora.

 Nos comenta la autora que al principio centro su atención a los padres a ver que tipo de monstruos eran, pero cuando se dirigió a los niños se dio cuenta que efectivamente los niños creían  y estaban convencidos que sus padres no los querían y deseaban matarles. En conclusión los niños están universalmente predispuestos al miedo al infanticidio por el estadio de su desarrollo físico o psicológico y la intensidad del miedo depende de la incidencia de suceso traumático y del grado de violencia y cariño que hayan experimentado.

Las inevitables frustraciones pueden producir una profunda insatisfacción con ellos mismos, ahogando la creatividad o llevándolos a realizaciones cada vez más amplias que raramente satisfacen sus objetivos inconscientes.

Debido a la ideas que se tiene de que sus pensamientos, deseos y sentimientos tienen una naturaleza mágica, el niño puede también sentirse responsable de una gama extraordinaria de suceso infaustos, el niño se siente culpable, de una muerte, en la familia, de un accidente de una enfermedad, de que su mamá trabaje de las discusiones entre sus padres, de la separación o divorcio. El pensar, el sentir y desear para el niño es actuar.

Que  miedo al infanticidio domine la vida del niño va depender de la incidencia de suceso traumáticos, sus deseos ocultos, la violencia  son su defensa para protegerse,  y no necesariamente el niño tiene que se el blanco de sus padres, sin hacia otros  incluso hacia los animales.

La idea de qué los niños tomen de forma universal que sus padres les maten es asombroso, y sin embargo se ha encontrado que es mucho mas aceptable  los padres  tengan la posibilidad de ese deseo. Hasta hace poco la idea de que los padres quieran matar a sus hijos a estado todavía más oculta que la de los niños pueden  vivir constantemente aterrorizados.

La mayoría de las parejas inician su vida con cariño y grandes aspiraciones sin embargo por amplios que sean sus  estudios son pocos los que disponen de los instrumentos necesarios para entender sus propios sentimientos y los de sus hijos, su esperanza de tener éxito allí dónde sus padres fracasaron están frecuentemente determinados a la desilusión.

Han pasado muchos años desde que Freud estableció la importancia de las experiencias infantiles y la influencia en la personalidad adulta.

Freud admitió la posibilidad de que su teoría sobre el complejo de Edipo pudiera eventualmente ser remplazada, nunca abandono la idea de que esta era la causa central de los problemas emocionales para comprender el porqué no hay más que examinar más que la propia teoría .

Cuando consideramos la vulnerabilidad  física y psicológica de los niños y el carácter inevitable amenazador de su mundo exterior, debemos maravillarnos de la forma en que consiguen sobrevivir el hecho de que a pesar de su terror, sobrevivan, salvo en raras ocasiones, se debe a los recursos de la mente y también al carácter predominantemente positivo del cuidado de los padres. Es raro el padre cuyo deseo de que su hijo muera no es compensado o superado por su deseo que viva.

El niño puede responder a la variante intensidad del deseo hostil y su expresión creando un sistema de defensas que son lo que nosotros llamamos enfermedades emocionales. En todos los casos  el refugio a su miedo al infanticidio era el cariño de sus padres, la esperanza de ganarse ese cariño se convertía en el fundamento de la estructura psíquica creada por el desde la primera infancia y a juzgar por su papel el pacientes mas adultos puede mantenerse hasta la muerte.

La confusión que tienen las personas dedicadas a la observación de los problemas psicológicos tienen su raíz en la complejidad de la estructura psíquica su componente principal parece ser el autoengaño. Todos los pacientes idealizan la imagen de sus padres y devalúan la suya en un proceso que por ser paradójico puede parecer hasta destinado como se aprende gradualmente a sentar las bases para ser finalmente querido.

Las fantasías infantiles parecían centrarse en el miedo a ser asesinados, pero el desplazamiento del miedo hacia monstruos y criaturas imaginarias estaba obviamente destinado a preservar una imagen idealizada de los padres de los cuales era posible asa recibir el cariño  tan especial para sobrevivir.

Los adultos raramente eran conscientes de las fantasías que muy a menudo controlaban sus vidas sin entender el origen de la función  de la pobre imagen que tenían de si mismos, por lo general llevaban un tipo de vida que desembocaba en fracaso o éxitos muy limitados, las alabanzas y el aprecio estaban descartados, únicamente podían enfrentarse al terror.

El miedo al infanticidio puede ser dominante en la primera infancia y seguir siendo una constante durante toda la vida, aunque sea en un plano mitigado e inconsciente, comenzó siendo una sospecha y tardo muchos años tras el análisis  de muchos pacientes en convertirse en lo que hoy es una realidad, la conclusión de que hay también una continuidad entre las fantasías defensivas  de los niños y de y la de los adultos se desprende automáticamente de su función como defensa contra el miedo.  

 

Infancia

“No me gusta pensar que soy una jirafa” fantasía de una niña  de tres años

La autora nos narra la historia de una niña de tres años y medio llamada  Ellie  que tiene no sólo el deseo oculto de infanticidio de los padres  si no también lo que ella experimentaba como una amenaza al infanticidio, no sólo pensaba que sus padres la quería matar sino que estaba segura de ello, finalmente comenta la autora que a los cinco años gracias al tratamiento psicoanalítico quedo resuelto el problema.

Los padres de Ellie   acuden al tratamiento psicoanalítico porque el carácter de la niña era imprevisible, le aventaba objetos a la madre hacia enormes berrinches e insistía que la llamarán bebe  usaba chupón y se le perdía le daban ataques de histeria. El padre explicaba el comportamiento de la niña como si creyera que un espíritu maligno se había apoderado de ella, acudió al psicoanálisis no porque creyera tanto en el sino porque estaba desesperado.

El padre de Ellie era joven  trabajaba en una compañía de ventas por que no permanecía mucho en el hogar, pero cuando llegaba fuera de noche o dia la niña advertía su llegada y se lanzaba sobre él, dándole pellizco tirándole la ropa  finalmente el la golpeaba, por lo que la niña se soltaba llorando. Su madre también joven describía a Ellie como una niña dulce tierna con otros niños. Desde el momento de su nacimiento su padre la cuidaba debido a que la madre se sentía indispuesta padecía de constantes depresiones   el era el responsable del cuidado de la niña sin embargo cuando tenía que ausentarse madre e hijo se iban con unas tías o con algún familiar. Para cualquier niño  este constante cambio de domicilio y cuidados era un desastre, además de los polos opuestos entre sus padres cuando  él estaba tenso ella estaba relajada y cuando él era brusco ella era suave, si él era estricto ella era tolerante si el era agresivo él era pasivo., y aunado el consentimiento de la abuela.

Los padres de Ellie se culpaban mutuamente por su comportamiento, pero a ninguno se le había ocurrido que las constantes ausencias del padre le afectaban de alguna manera, el que la niña odiara al padre  no cabía esa idea, cuando la psicoanalista le menciona esa posibilidad en la segunda sesión  ya que tampoco había hecho esa conexión entre la llegada a su casa y su breve visita al cuarto de Ellie se maravillaba que aun estando dormida se percataba de su llegada.

Cuando comprendieran que los malos ratos que  Ellie  les hacía pasar no eran  nada en comparación con los que ellos le hacían pasar a ella se sintió totalmente abrumado porque nunca supuso que su cariño fuera tan importante para Ellie.

La importancia de conocer todos los detalles posibles de la historia del paciente sobre todo si estos son niño si se quiere entender el significado de sus expresiones, sus fantasías y sus juegos. Aparentemente su miedo al infanticidio es tan intolerable y su necesidad de sentirse querido por sus padres tan grande que inventa cualquier cosa para defenderse contra los sentimientos de hostilidad y rechazo que adivina en ellos. No sólo es la imagen fantástica a la que se refiere Klein una gran parte de la realidad emocional y un componente de su vida mental si no que también el uso de gran cantidad de figuras amenazadoras revela la profunda preocupación del niño por desplazar el miedo de sus padres, camuflando su identidad y ocultando sus percepciones.

Freud describía lo que consideraba como  la función defensiva de la fantasía  las fantasías surgen escribía  por una combinación inconsciente  de cosas experimentadas y oídas construidas con percepciones determinadas. Si añadimos percepciones y sentimientos a los recuerdos tenemos una definición  de la función defensiva de las fantasías  que se ajustan al miedo de los niños al infanticidio. Cuando la fantasía de desenvuelve libremente y el sujeto esta orientado, no hay dificultad para entenderlo. “la fantasía nunca está divorciada de la realidad.

El mundo puede ser una abstracción de un poder infinito, un peligro una crueldad, una locura o cualquier otra cualidad que represente la percepción de la realidad del niño o puede ser lo contrario el niño suple la fantasía  todo lo que le falta en el mundo real y vive en un continuó idilio, en algunos casos puede crear un mundo utópico, que se convierta en su nueva casa.

Se crea la ilusión de ser invisible, o una sombra o vive su fantasía, algunos niños la despersonalizan  dotando a los objetos de sus sentimientos, crea otra identidad distinta  o llenan el mundo de espíritus aliados a los que pueden llamar por telefoneo imaginario cuando el peligro es demasiado.

Al año y medio de la terapia Elle era otra  fue capaza de resolver sus fantasías  y progresar hacia la verbalización directa  que culmino en una sesión de confrontación.

Superratòn: Nacimiento y muerte de una fantasía defensiva

La historia de Larry, un niño de cuatro años y medio adquiere una identidad de superratòn, era hijo único y sus padres se había separado, su madre era una mujer atractiva pero algo seca, se había casado un un sr. 15 años mayor que ella,  lo describía  como una persona violenta y malhumorado  se pasaba gran parte su tiempo libre viendo la televisión, habían vivido en california los dos primeros años de vida de Larry, pero después se mudan a Nueva York su madre y èl Vivian en un apartamento pequeñísimo.  Ella  no le daba mucha importancia al cuidado de su hijo, su tía lo llevaba a la terapia.

Larry un niño con una sensación de vacío con una profunda depresión, daba pasos largos. “Superratòn es mi amigo anuncio al llegar a la  terapia. “es muy fuerte y puede hacer cualquier cosa” dijo orgullosamente “nada puede hacerle daño” No me acuerdo qué pasó exactamente, pero fue un día terrible y metieron al hombre a la cárcel  y no le dieron de comer y murió. Y después con más intensidad, era más malo que un pirata” con este comentario de Larry demostró su trauma es evidente  que el suceso que narra es el de sus padres, cuando creyó que los poderes mágicos de superratòn podrían salvarlo de la tragedia.

Con una serie de psicoterapias que duraron año y medio Larry salió de su fantasía, con la ayuda de su madre que siguió las instrucciones de la terapeuta.

La primera clave del tratamiento  la aceptación entusiasta de la identidad por parte de la psicoterapeuta, a las estrategias utilizadas con los ratones de peluche, la importancia de sentirse querido para invertir un proceso patológico. El refuerzo del yo que lo llevo primero a crear una fantasía  y después aceptar su verdadera identidad.

Cuatro niños que insistían en pertenecer al sexo opuesto.

Aunque los sentimientos homosexuales son universales, la persistencia adopción a la fantasía de una identidad sexual distinta sólo parece producirse en unas circunstancias específicas.

Después del análisis de los cuatro niños la autora afirma que  al igual que Larry son fantasías defensivas, debido a una situación frustrante  que le hizo temer por su vida. Estos niños no adquirieron una identidad de superratòn o cualquier otro, si no que optaron por una identidad sexual.

 Los cuatro niños habían estado expuestos a la violencia  de sus padres y esto les origino  miedo al infanticidio y una manera de defenderse es cambiando su identidad.

En los cuatro casos los niños estaban convencidos por los sentimientos y su comportamiento entre si y con los hijos, de que los padres no se querían y que el padre del sexo contrario les prefería. Por lo tanto, atribuían el violento rechazo del otro padre. Al crear la fantasia de que pertenecían al sexo que ellos creían preferido por el padre amenazador confiaban no sòlo en apaciguar los celos de ese padre sino también en transformar la violencia en amor. De esta manera el cambio de identidad les proporcionaba un refugio a su miedo a ser asesinados y una esperanza a se queridos.

La homosexualidad implica satisfacción sexual de unas necesidades instintivas pero en este caso la transformación de la identidad sexual ocurre mucho antes.

El primer caso es una niña llamada Rose de cuatro años, con una conducta agresiva y provocadora había sido expulsada de dos escuelas en poco mas de un año, ella decía que era un niño, no le gustaba el vestido y jugaba únicamente con niños, mordía y tiraba cosas, quitaba los juguetes a otros niños, su madre decía que tuvo problemas al destetarla, la madre no era nada masculina el padre se percibía el mas dominante parecía agresivo y enérgico mientras que ella pasiva e indiferente, el padre confeso que antes de que naciera la niña el quería que fuera varón, y se desilusiono sin embargo se encariño mucho con ella, sin embargo cuando hacia rabietas la golpeaba como forma de castigo. Tenía un hermano  que obviamente vino a cumplir los deseos de su padre.

Rose insistía que era un niño con el intento desesperado de salvar su vida  ganarse el cariño de sus padres.

El caso de de Richard un niño de seis años insistía desde hace año y medio que era niña, en la escuela era el centro de burlas, por su preferencia por la ropas femeninas y jugar con las niñas y sus muñecas y su concentración en la figura masculina y su negativa a desnudarse en público a la hora de hacer gimnasia o nadar,. Como no jugaba con otros niños era el compañero de su madre y esto le preocupaba, tenía un hermano de trece años y también era un gran problema porque se parecía a su madre, mientras que el se parecía a su padre y el era feo como consecuencias sus movimientos femeninos para disimular esa fealdad.

El padre de Richard sufría de depresiones había estado hospitalizado de un intento de suicidio. Cuando comenzó el tratamiento de Richard, se limitaba acostarse un ratito con el y de vez en cuando sacarlo a pasear.

 La relación que Richard observaba en sus padres le había hecho creer que el era el compañero preferido de su madre.

El padre rechazo a Richard desde el momento que nació, la madre afirma  uso ropa femenina cuando ella tenía 3 meses de embarazo, después del nacimiento del niño percibió que el rechazo de su padre se debía al parecido de su hijo con él, y fácil aceptación de su hermano pequeño.

El siguiente caso es el de Lorna  su cambio a la misma edad que la de Richard  y también al nacer su hermano, los dos padres eran violentos y se peleaban continuamente, el padre era violento solamente con la madre, además Lorna tenia mucha inseguridad, su padre era muy autoritario y siempre corrigiendo a la madre sobre el cuidado de la niña, las necesidades y los deseos de Lorna eran órdenes para su padre, Lorna casi no veía a su padre solo cuidados y la furia de su madre. Con el nacimiento del hermano se perdió el interés por Lorna de parte del padre, esta tenía que Luchar por el hermano y cambia su identidad sexual para sentir seguridad.

Dany un niño de cinco años y medio la relación entre las fantasías suicidas y la adopción  de una identidad sexual contrario, al principio las fantasías de Dany le defendían contra el suicidio y la amenaza de ser asesinado, sólo cuando estas preocupaciones disminuyeron comenzó a manifestarse su fantasía de ser mujer.

Sus padres lo llevaron a terapia porque la maestra les dijo que el niño era demasiado inmaduro para pasar curso, era evidente que Dany estaba embarcado en una lucha de vida o muerte, la única salida que el veía era la muerte ya fuera por si mismo o que otra persona lo hiciera, la causa fundamental era su hermano Joey cinco años mayor que él, siempre lo había ignorado no jugaba con el y en ocasiones le decía que ojalá se muriera, pero según èl no le creía.

Dany demostró sus sentimientos de desamparo por  medio de un test  y la historia escrita por el, en la cual describía un bebe  en un partido de pelota.

Cuando Danny comenzó a darse cuenta  del funcionamientos de su mente lo abordo con cautela, a pesar  de todo alternando con sus fantasías comenzaron aparecer gradualmente en la que todos sus soldados eran derrotados y solamente el conseguía escapar en un  aeroplano, y después aparecieron las primeras señales homosexuales, poco tiempo después Danny tuvo una experiencia que precipito la fantasía homosexual.

Después de un viaje que hizo con su madre,  volvió tenso y ansioso con un problema nuevo  con una necesidad constante de orinar, y eso molestaba porque tenía que salir de clases con frecuencia. 

Empezó hablar  sobre la dificultad que tenía de hacer amigos y de los deseos de su hermano de que se muriera, y de sueños de sus sueños de un avión negro, de una señora que se bañaba en un lavado, también quería saber cómo se hacía el amor y que tenía ganas de hacerse mayor para hacer eso,  sus ganas de orinar desaparecieron  se debía al exceso y estímalo del acto sexual sin embargo durante una año Danny siguió con su identidad homosexual, relataba  juegos sexuales con dos niños de su clase uno de los cuales le ignoro después de la experiencia.

 Durante los meses siguientes  adopto unos modales femeninos  inconfundibles, su exhibicionismo provocaba el ataque de sus compañeros, pero él prefería  al rechazo o indiferencia, parecía satisfacerle las bromas que le hacían por ser una niña, era evidente que le complacía, cuando lo confundía. Su hermano también tenía un año de tratamiento y sus relaciones habían mejorado, por primera vez dejo de tener pensamientos suicidas, el desprecio y el ridículo eran cosas del pasado.  

La madre dejo la familia y la respuesta  Danny fue comenzar una relación con una chica de su clase mucho más intensa de lo normal para una chico de once años duro casi un año y termino con una serie de recriminaciones, que como el mismo reconoció estaba relacionadas con su madre, a pesar de que ya no había evidencias de su feminidad de vez en cuando dejaba ver su identidad secreta. Una vez acabada la relación con la chica volvió  los juegos sexuales con los mismos muchachos de antes y describió cómo se masturbaban unos a otros.

De los cuatro casos Danny  era el menos protegido de los cuatro no solamente creía que todos los de la familia querían matarle sino que además no había nadie que le ofreciera refugio, por eso sus fantasías iniciales eran el suicidio y la muerte, es interesante señalar que después del tratamiento creo la seguridad suficiente para permitirle afrontar la vida familiar, atreves de la televisión aparecieron las fantasías homosexuales y fueron adoptadas después del viaje de su madre, porque su seducción y preferencia  por él frente a su padre y su hermano aumentaron la inseguridad.

Con estos cuatro casos se aprende bastante sobre la sintomatología de  los homosexuales adultos. La preferencia con la que el homosexual insiste en que la fantasía es real. En el caso de los niños el peligro era  de vida o de muerte.

No Salí del vientre de mi madre

 

Una fantasía que duro tres años en resolverse

            Este caso  es de  un niño está intentando resolver la fantasía que ha creado para defenderse  contra de su terror.

El tratamiento psicoanalítico el analista maneja las fantasías  de acuerdo con las claves dadas por el niño. Puesto que el niño ha creado fantasías  para defenderse. En los casos en los que la habilidad del niño para fantasear parece disminuida, el analista puede liberar y enriquecer la fantasía a partir de lo que el niño ha enunciado pero teniendo siempre cuidado de no usurpar el papel del niño.

José un niño de cinco años y medio  proclamo su identidad en la primera sesión diciendo “yo no soy americano” “no salí del vientre de mi madre” “quizás del de mi tía”, la sensación de rechazo a su nacimiento quedo aclarada  convencido de que su padre quería matarle, el proceso que llevo José hasta la verdadera identidad como se podía esperar de alguien que vivía en un campo enemigo  casi desde su nacimiento.

A sus cinco años José dominaba todas las artes que esperaban de él y mas que era un líder entre los niños  y ganaba su admiración con facilidad, su capacidad creadora era un orgullo para sus padres, La madre tenía la impresión de que todo había empezado con el nacimiento de su hija Mary con la que tanto su marido como ella se relacionaban más fácilmente, había cosas que no perdonaban a José como el chuparse el dedo, después del nacimiento de Mary, también empezó a masturbarse, después de toser continuamente  y finalmente a parpadear, también le gustaba tocar el pelo, tenia constantes explosiones de coraje incontenibles, el marido re rio de la forma como la madre describía el comportamiento de del niño.

No tenía ninguna dificultad en calibrar el grado de terror necesario para que un niño adoptara formas camufladas de expresar su oposición o empleará actos compulsivos para reprimir la ira. El padre José no sólo me engañaba a mí sino también asimismo su relación feliz era una barrera que se rebeló  durante el tratamiento de su hijo, había tenido una infancia muy complicada.

Finalmente José me confió su identidad, al principio supuse que era la de retirarse y esconderse, sólo era posible la oposición oculta los métodos tortuosos de guerra daba la sensación que mantenía su sentidos de seguridad y el control de la forma mágica excluyendo a los adultos de su radio de visión. Su ensoñación era su única expresión consciente de su rebelión contra la necesidad de una obediencia  rígida  a fin de crear una sensación de seguridad las dimensiones del odio engendrado por la hostilidad del medio ambiente parecía necesitar una defensa inconsciente, adicional cuyo objetivo era la represión masiva de los sentimientos.

En tres años de tratamiento José se había referido a su padre solamente un vez y a regañadientes cuando poníamos calcomanías en los modelos, “mi padre me regaña cuando pierdo las piezas” .

Su primer acto después de su triunfo sobre los americanos en su fantasía fuera a invitar a su padre a discutir sus experiencias en la guerra y luego exhibiera orgullosamente la insignia que de un soldado americano demostró espectacularmente la dirección inconsciente de su impulso hacia la recuperación al decir yo no soy americano su adopción de la identidad fantástica de un enemigo extranjero le había defendido contra su miedo del infanticidio, ya que explicaba y justificaba los sentimientos homicidas de su padre hacia él.

El tratamiento lo suficiente como para establecer su superioridad y derrotar a sus enemigos, los americanos, disminuyo su terror lo suficiente para desarrollar su fantasía  y ser capaz de establecer su verdadera identidad. Entonces pudo verbalizar  directamente los sentimientos homicidas y libidinosos que hasta ese momento sólo había expresado su fantasía.

La fantasía del perro que no merecía ser una  niña

El  que la fantasía pueda llegar con éxito a este punto depende tanto de la capacidad de cambio de los padres como de la habilidad del analista a la hora de manejar  la fantasía, cuando no hay mejora en el ambiente familiar, la necesidad de una fantasía defensiva puede no  resolverse del todo. La cuestión más importante a la hora de manejar una fantasía  es ante todo el significado de la comunicación.

La aceptación por Anna Freud  del mundo objetivo como un factor importante en el mecanismo de defensa de los niños abrió el camino para nuestra forma actual de entender el papel de las relaciones padre-hijos en el origen de los problemas emocionales de  los niños. Esa orientación y el reconocimiento del miedo de los niños al infanticidio nos permiten entender el significado de sus comunicaciones.

El primer paso para entender la fantasía de los niños es acumular toda la información sobre la historia  y el desarrollo de la vida del niño, otros métodos para manejar la fantasía por su doble función, las fantasías defensivas están destinadas no sólo a proporcionar escape al insoportable terror sino también a proyectarlo en criaturas imaginarias a ocultar su fuente e idealizando a los padres  supuestamente cariñosos para sentirse seguros de esto depende que cualquier descubrimiento de las bases reales.

 Este descubrimiento puede incluso poner en peligro la vida del niño esto se demostró cuando un inexperto psicoanalista le pregunto al niño que estaba que si podía identificar las figuras de su fantasía y su respuesta fue “si supiera quienes son me suicidaría” .

Dado que su identidad es el instrumento principal de su defensa y un elemento esencial para su sistema para engañarse a si mismo. Una fantasía puede progresar a través de diferentes etapas  durante varios años hasta que su resolución lleve al niño a un punto en el que está preparado para expresar directamente los pensamientos y sentimientos que la fantasía había escondido. Cuando el niño no recibe tratamiento psicoanalítico   llega adulto y como no fueron capaces de desenterrar las fantasías antiguas  estas tienen una gran influencia en su vida como parte de su inconsciente.

El caso de Patty  hija única  de siete años con un diagnóstico de esquizofrenia, que venía padeciendo tres años anteriores con una fantasía  que introdujo y su problema era de identidad, al comenzar el tratamiento era una criatura no humana sin sexo que gradualmente se volvió femenina, adopto primeramente una identidad de un caballo, luego la de un perro que no merecía ser niño, luego me asigno como un amo malo y más tarde la de amo bueno. Su habilidad para cubrir sus necesidades emocionales durante todas las etapas de la evolución de su fantasía  hasta que salió de su esquizofrenia, demuestra la capacidad humana en la lucha por permanecer viva.

En la entrevista con sus padres dijeron que no había sido una niña deseada había sido una interrupción en sus vidas  de la cual todavía se arrepentían, la madre era delgada rubia con ojos azules y moderadamente atractiva parecía mas abierta y tener menos inhibiciones a la hora de expresar sus sentimientos destructivos, había querido ser cantante pero el embarazo  le cambio sus planes, el padre era bajito con una expresión agresiva e incapaz de expresar sus sentimientos.

Los dos se sentían mortificados por la impresión que Patty daba al público motivo por el cual la trajeron a la terapia psicoanalítica.

La uncía solución que patty encontró para librarse del peligro constante de su medio amenazador y del papel de bruja de su madre fue a venirse a vivir conmigo, la cual desarrollo con frecuencia como respuesta a la necesidad de refugio que siente el niño se cura en su relación con sus padres de mejora. En el caso de patty, la falta de un verdadero cambio en sus padres dio lugar a algo curioso patty llego de sus vacaciones  sintiendo coraje con su terapeuta que se expresaba con silencios.

En los padres de patty no hubo ningún cambio no le  brindaban el  cariño a pesar de eso salió de su esquizofrenia  a través de la fantasía  y suspendió su tratamiento cuando estaba empezando a expresar su ira.

La inhibición de la fantasía y la predisposición a matar

La inhibición de la fantasía  puede en algunos casos no ser considerada como una defensa contra el persistente abuso  de la violencia en un medio falto de cariño si no también una predisposición a cometer asesinatos. Por la investigaciones realizadas se ha demostrado que la experiencia de individuos que han cometido asesinatos, algunos escritores continúan viendo la comisión de una asesinato como la última prueba de la naturaleza despreciable del hombre y la atribuyen a un instinto asesino Anthony Storr apoya esta postura en la siguiente declaración “la triste realidad es que somos la especie más cruel y despiadados que jamás ha pisado la tierra….los hombres sabemos en el fondo que cada uno de nosotros alberga esos impulsos salvaje que llevan al asesinato la tortura y la guerra”.

  “la evidencia psiquiátrica no deja lugar a dudas la agresión no es meramente una repuesta a la frustración es un impulso universal profundamente arraigado. Cuando el hombre ha sido comparado con el reino animal su posición en la jerarquía moral es la más baja. Lejos de ser una expresión natural de los impulsos agresivos el asesinato tienen normalmente una prehistoria que se remota a la infancia y surge de una serie de circunstancias muy especificas. En los estudios de componentes psicológicos de gobierno  por declarar guerras  especialmente guerras de  agresión así como la investigación tanto de las experiencias tempranas de los asesinos como los de las raíces de la violencia sugieren por lo general que antes de que la gente sea capaz de matar debe producirse un proceso de enajenación , Paul schilderr  explica la actuación del típico asesino  joven y en general describe sus sentimientos de enajenación  afirma es como la vida y la muerte no desempeñaran un papel importante en el contenido  de la vida psíquica. Las personas de este tipo matan con la misma facilidad  con que los niños juegan a matar y no están más preocupados por su propia muerte de lo que están los niños.

No creen hacer nada malo ya que la misma sociedad le ha hecho así. No ha tenido nunca nada de modo que le corresponde a la sociedad cuidar de él ahora y si no se lo da, el mimo lo tomará por lo tanto robar es algo natural en el asesinar es accidental

También hay otros estados emocionales que llevan al asesinato en muchos casos la represión de los sentimientos y la inhibición de la fantasía son tan profundos que la acción de matar queda disociada. Todos los asesinatos  y asaltos son actos disociados.

Los sistemas de gobierno que engendran el asesinato unas métodos a fin de preparar psicológicamente para la guerra establece el reconocimiento generalizado  del papel esencial de la enajenación a la hora de matar, la enajenación ha sido siempre una arma primordial de los gobiernos.

Los gobiernos para preparar los asesinatos  en masa dejan establecida la importancia de los sentimientos de enajenación como condición previa para que un asesinato sea cometido, si queremos entender porque algunas personas sólo necesitan una señal para matar y en cambio otros están dispuestos a sacrificar su vida antes de cometer un asesinato hemos de volver  a la vista al medio familiar.

Stuar palmer establece que los asesinos   parecen haber sido terriblemente frustrados durante su infancia, sufriendo traumas durante su nacimiento, enfermedades graves durante la niuñez, accidentes, palizas pràcticas severas de aprendizaje a manos de la madre, frustraciones psicológicas  e incidentes traumáticos fuera de casa. Encontró que había una relación significativa, positiva y funcional entre la cantidad de frustraciones experimentada por los individuos durante su infancia y adolescencia y el hecho de que cometieran o no un asesinato, mas adelante en una situación particularmente frustrante, su agresión reprimida explotaba y mataba al individuo al cual consideraba el principal responsable de su frustración.

Las entrevistas con los distintos asesinos establecieron sin duda alguna la extraordinaria brutalidad a la que habían sido expuestos durante su infancia.

Los sentimientos de enajenación de los cuales se ha venido hablando antes tenían una dinámica claramente definida en algunos casos de asesinatos.

La inhibición de los sentimientos con los que estos implica la inhibición  de la fantasía  aparece en todos estudios hechos por la personalidad  de asesinos  y los relaciono con los niños antes mencionados.

La persona extremadamente agresiva es a menudo un individuo comedido resignado que entierra  su resentimiento  bajo un con trol rígido y frágil. Los dóciles y apacibles pueden resultar más peligrosos que los que son capaces de expresar su agresividad interior.

De la misma manera los sentimientos de enajenación que parecen ser el resultado de los malos tratos persistentes en un medio hostil y que parecen ser aceptados por los gobiernos  como instrumentos esenciales en la preparación psicológica para matar en las guerras de agresión.

La inhibición de la fantasía  que sirve como defensa contra los malos tratos persistentes en un medio hostil puede sugerir por lo tanto una predisposición  a cometer asesinatos.   

La inhibición de la fantasía: un caso de autismo infantil

La esquizofrenia está dominada generalmente por la fantasía el autismo infantil se distingue  por lo que parece ser una inhibición absoluta de la fantasía  y de los sentimientos por una compulsiones  y ritos que parecen a menudo incomprensibles.

Los adelantos técnicos han establecido desde hace algún tiempo que la esquizofrenia es reversible y  curable, todavía hay una gran confusión acerca de las causas y de la curación  y también acerca del diagnóstico especialmente en niños.

Las razones por los que la esquizofrenia es tan confusa se derivan no sólo del carácter mistificador de los síntomas si no también de la comprensible renuencia a admitir que esos síntomas, por terribles que puedan parecer son defensas  y aquello con lo que se defienden pueden ser el terror  y el  miedo a matar y ser matado.

 Entre sus variantes encontramos un renuencia absoluta a la realidad y al mundo de las relaciones humanas, a veces una regresión a un estado infantil, una confusión interna caracterizada por una serie de expresiones que va de una total mudez  hasta una explosión constante, una ira grande que su control absorbe  todas las energías del paciente, y una extraordinaria sensibilidad.

La continua versión admitir  la presencia de factores ambientales  en la génesis de la esquizofrenia  se puede achacar a los sentimientos de culpabilidad y vergüenza que todavía envuelve las relaciones de padres a hijos. La negación de la conexión  entre las enfermedades emocionales de los niños y sus respuestas al trato de los padres. Al negar el papel de estos, han conseguido únicamente aumentar en muchos casos la represión de los sentimientos y la exacerbación del conflicto, para escapar de la carga insoportable de esos sentimientos muchos padres muchos padres encuentran alivio en la idea de que sus hijos sufren un enfermedad congénita incurable en la cual no han desempeñado ningún papel.

Muchos investigadores están convencidos de que la esquizofrenia es incurable, buena parte de la controversia sobre el tema se ha centrado en cuestión  de la dinámica.

Los estudios de Kallman sobre gemelos esquizofrénicos le ha llevado a creer que una persona no nace siendo maniaco depresivo o esquizofrénico  pero si tiene una predisposición genética  a  reaccionar de esa manera a unos estímulos que necesitan la crisis, en otras palabras tienen una predisposición a esa condición, que sin embargo según Kallmann  puede ser prevenir y curada, Brender la describió como un retraso en el desarrollo embrionario y administro tratamiento de shok  a estos niños. Los factores psicodinàmicos inherentes a las relaciones entre padres e hijos y la influencia de la madre esquizofrenia han llamado la atención  de un número creciente de investigadores.

Bergamann y E Escalona  estudiaron sobre la sensibilidad poco corriente de ciertos niños muy pequeños que más adelante se convierten en psicópatas, le hicieron volver al concepto de Freud de “aparato perceptivo de nuestra mente” que consta de dos capas: una barrera exterior protectora contra los estímulos, cuya tarea es disminuir  la fuerza de estos  y otra superficie detrás de esta que es la que recibe los estímulos” a la creencia de Freud de que “el yo crece” como si dejáramos en lugar de la barrera protectora original y es el único que protege, ellos añaden de que la barrera protectora continua funcionando a lo largo de toda la vida del individuo mientras el yo refuerza esta protección  propone que debido a la delgadez de la barrera protectora o debido a un fallo en la protección materna el niño a de recurrir a la formación de un yo, el cual cuando se deteriora, posiblemente como consecuencia de un trauma, hace que aparezcan los síntomas psicóticos.

 El paciente esquizofrénico es una persona que no ha desarrollado las necesarias capas protectoras aislantes que aparecen cuando el niño recibe los cuidados, la protección y la comprensión adecuados cuando esto falta el niño no sólo está  expuesto a una superestimulaciòn  lo cual lo hace retraerse para procurarse el necesario aislamiento, sino que además no puede desarrollar sistemas satisfactorios de descarga. En su interior se acumulan cantidades de agresión que no se atreve a liberar por miedo a destruir a las personas que  quiere y de las cuales depende para sobrevivir. Prefiere dirigir la agresión a si mismo.

Para llevar a cabo el tratamiento  el terapeuta debe proporcionar ante todo los cuidados la protección y la comprensión  que el niño no ha conocido , permitiéndole así desarrollar  el necesario aislamiento para salir de su estado de retraimiento. También se le enseña a liberar su agresión  y una forma distinta y más satisfactoria primero a través de la fantasía y después y mas delante de la verbalización  directa.

El caso de un niño llamado Joe el cual los padres estaba muy preocupados e interesado por que se curara, Joe fue un niño feliz y normal hasta los dos años  y miedo cuando nació su hermano solamente con un comportamiento compulsivo y con un miedo irracional,  luego se dieron cuenta que el niño menor no era normal pero tardaron más de un año en diagnosticar su enfermedad. Cuando empezaron a buscar ayuda para Joel  su comportamiento encajaba en la descripción clásica de autismo infantil. Su lenguaje era una jerga incoherente y repetitiva  de carácter ecolàlico, cuando se le preguntaba algo en vez de contestar repetía, vivía en un mundo autístico donde las personas y los juguetes eran ignorados pasando la mayor parte del tiempo golpeando con un palo  y emitiendo sonido inarticulados. El comportamiento ritual izado y la masturbación y la forma de comer compulsivas se convirtieron en la norma. Cuando se enfadaba se golpeaba la cabeza o hacia como si se mordiera las manos. Nunca lloraba con lágrimas únicamente emitía los sonidos que acompañan al llanto.

En su estado de desarrollo solamente podía interpretarlos  mágicamente como causados por el. La respuesta de Joey al tratamiento  no solo dejo establecido que en su caso el autismo infantil era reversible y con el método correcto probablemente curable sino que además sugirió que su autismo  con su completa sintomatología  era una defensa necesaria debido a l carácter amenazador de su medio y su miedo a matar o ser matado.

 La naturaleza de esta amenaza y su respuesta estaban representadas de forma dramática  por sus ritos, su necesidad de tener siempre un objeto para sacudir. La interrupción del proceso de aislamiento  después del golpe traumático de los padres al descubrir la anormalidad de su hermano menor hizo retraerse para protegerse de los estímulos exteriores e interiores, su preocupación simbólica por los actos simbólicos de la violencia podría indicar su necesidad de controlar tanto los sentimientos como sus impulsos violentos. La atmosfera  del tratamiento  psicoanalítico  que le hacia sentirse cuidado,  protegido y comprendido le ayudo a desarrollar el aislamiento suficiente para salir de su retraimiento. Mientras se le  proporcionaron oportunidades para liberar sus sentimientos pudo dirigirlos hacia fuera en vez de dirigirlos contra el mismo.   

 

Años posteriores

Niño despreciable y padre noble

El  caso de Norma una paciente de   37 años con una fuerte depresión nerviosa, con una fantasía no resuelta de sus primeros años de vida, el miedo a ser asesinada por su madre  había sido reprimidlo  para sobrevivir durante la primera infancia. el hecho de que su madre hubiera muerto  unos años antes no había disminuido para nada la intensidad  con la que norma buscaba desesperadamente  a la ausencia de cariño de su madre  o su lucha continua por ganar ese cariño. Norma ensalzaba las virtudes de su madre con un grado de perfección.

Norma se empeñaba  en sentirse despreciable, su necesidad de creer que su madre tenía únicamente cariño por ella exigía que enterrase se percepción de los sentimientos hostiles de su madre. El mantenimiento de la fantasía era una cuestión de vida o muerte  se veía claramente en que    la fantasía se veía amenazada, por eso evitaba cualquier manifestación de aprobación o desaprobación. Si permitía que esos sentimientos salieran a la superficie revelarían inevitablemente que era una respuesta a lo que su madre sentía hacia ella. Norma era divorciada con una hija de once años, el divorcio trajo consigo sentimientos de no valer nada y pensamientos suicidas.

Cuando empezó su tratamiento se observo el interés por escribir  y como un suplemento a las sesiones  escribía todos los días estableciendo una relación familiar con la infancia. Al principio todo estaba enfocada  a las críticas que le hacia su amiga Ada, la cual de manera inconsciente la relacionaba con su madre. En sus narraciones era evidente  la forma como se engañaba a si misma, no era una niña feliz pero su mayor preocupación eran los sufrimientos de su madre, a pesar de las pruebas de abandono que presentaba nunca había pensado que su madre la odiara, lo que más la desconcertaba era la ignorancia de su madre y la violencia de su hermano Danny.

Para mantener su imagen de inutilidad norma había desarrollado una técnica  que llamaba el proceso de criba, un método para sacar cualquier experiencia por positiva que fuera o algún pequeño detalle.

Se ha demostrado que el éxito puede precipitar la acción en un paciente  con tendencias suicidas pero no es tan claro que la pasividad, el sofocamiento de la creatividad, la inhibición del esfuerzo o el embotamiento de las aspiraciones sean suplemente una expresión de una determinación inconsciente, evitar descubrir el sistema de autoengaño y arriesgarse a ser asesinado.

Para Norma, al igual que otros pacientes el problema de identidad se complicaba. Atribuía su pérdida de haber crecido y haberse hecho independiente de esas personas y anhelaba volver al estado antiguo. Manteniendo la ilusión del desamparo, había intentado revivir mágicamente su única experiencia  de cariño materno: el cuidado físico  que su madre le había dado durante la infancia  y la niñez.

El examen de sus relaciones familiares por ese último descubrimiento la llevo directamente  al terreno de los sentimientos homosexuales, aunque reconocía que esos sentimientos reflejaban su búsqueda de cariño, se sentía preocupada por lo que consideraba su anormalidad y hablaba de ello con una gran dificultad. “lo único malo de ti es creer que todo está mal”.  Cuando admitió la idea de que  todo era normal acepto  no sólo sus sentimientos de ira sino también  lo de otras personas, especialmente los de su amiga Ada  y por primera vez se permitió  expresar sin inhibiciones el odio a su amiga idealizado la imagen de su madre devaluando la suya  en un proceso que intentaba preparar el camino y para ser finalmente amada.

La doble función de la fachada de Norma defenderla contra el miedo  a ser asesinada y ganarse el cariño  indican la complejidad del proceso de liberación.

Finalmente fue capaz  no sólo que había sido su falta de valía  la causante del odio materno  y de su deseo de matarla, si no que aunque hubiera sido capaz de probar su valía  no se habría ganado su cariño. Fue capaz de abandonar la fantasía  gradualmente al igual que el propio engaño  que le había impedido la verdadera identidad de su madre o la suya propia  sólo entonces estuvo capacitada para buscar el amor en otro sitio y dedicarse a su búsqueda con madurez.   

LA NECESIDAD DE UNA IMAGEN DISTORCIONADA DE LOS PADRES

La imagen distorsionada de los padres puede ser esencial  para el sistema defensivo de la psique. La distorsión defensiva más corriente es la idealización de los padres, la cuál es una función universal en las fantasías de los niños y un factor  dominante en la sintomatología  neurótica, junto con la devaluación de la propia personalidad.

En el caso de norma presentaba esta distorsión ennobleciendo  la figura materna, “cuanto más ennoblezco  mas compresible resulta que no pudiera querer. Las imágenes distorsionadas son una defensa  al infanticidio y elementos esenciales en las fantasías de ganarse finalmente el cariño de sus padres. Cuando se produce el cambio de una idealización a un desprecio a de los padres el paciente  puede paradójicamente estar dominado por la fantasía defensiva. Cuando la liberación de la ira acumulada del paciente y el establecimiento de los comienzos de su verdadera identidad llevan al descubrimiento de los sentimientos hostiles de los padres y  al derrumbe de la idealización de los padres.

Mientras    los esfuerzos del paciente para establecer su falta de valía forman parte de la fantasía  que prometía que cuando el cambiara sus padres lo   querían, sólo cuando el paciente ha sido capaz de renunciar   a su imagen devaluada de sí mismo por una más realista y ha conseguido mejorar sus condiciones de vida ha podido abandonar su fantasía  de conseguir un día el cariño de sus padres y con el su necesidad de atacarlos. la aversión de aceptar la realidad de los padres hasta que se llega a ese punto sugiere que una imagen distorsionada de los padres puede ser un factor esencial en el sistema defensivo de la mente.

 

La fantasía inconsciente de un niño abandonado

No es raro encontrar que la vida de un paciente esta dirigida por una fantasía inconsciente.

En el caso  Jonny demostró la relación existente entre la intención de la amenaza del infanticidio y la amplitud de la fantasía  inconsciente para poder soportarla. El efecto de la violencia a que había estado expuesto se había puesto ya de manifiesto pero el hecho de que su vida estuviera dirigido por una fantasía  inconsciente y el tipo de tratamiento   no resulto  hasta que adquirió suficiente sentido  de su propia identidad para revelarlos .

Jonny era hijo ilegitimo, inicio el tratamiento en la dolescencia  con el fin de ayudarle a descubrir la fantasía inconsciente que había dirigido su conducta autodestructiva. Además de sus comunicaciones verbales. La madre adoptiva de Jonny conto lo que sabía de él  su padre biológico era Irlandés y su madre italiana y tenia dieciséis años cuando nació, paso sus primeros dos años en un orfanato y luego fue asignado por la agencia a un hogar adoptivo donde permaneció hasta que tuvo casi siete años, posteriormente la agencia declaro a los padres adoptivos incompetentes  y se llevo al niño, después de la separación la conducta del niño fue muy problemática de tal forma que en año y medio tuvo diez hogares  adoptivos diferentes lo cual para Jonny era un total desconcierto.

Posteriormente la agencia lo entrego a otra pareja la cual se sintió  encantados por su aspecto seductor,. La agencia no le hizo ninguna recomendación lo que querían era encontrar un hogar para el., los padres adoptivos se dieron cuenta de los problemas  de Jonny sin embargo coincidieron que lo que le faltaba era cariño, Jonny demostró grandes habilidades para la música, de manera que los padres  pidieron a un amigo violinista que lo enseñara.

Después de varias sesiones Jonny  confesó que era adoptado y  conto la historia de su origen, sabía que su madre tenía dieciséis años pero que cuando tenia seis años y medio se lo habían robado a sus padres, se acordaba del día con toda claridad que varias personas se lo llevaron a rastras de su casa, mientras sus padres se quedaban llorando, luego lo llevaron a una agencia amable pero constantemente trataba de deshacerse de él, llego a pensar que la asistencia social era su madre. Posteriormente la terapeuta le cuenta la historia como la había contado su madre y resiste creer y grita que nos cierto  e insistió con mucha ira que se lo habían robado. El descubrimiento que se verdadera madre lo había abandonado, recordaba que varias veces se había escapado con la esperanza de encontrarlos, todo su anhelo y su ira la centraba en su madre y desde entonces buscaba en todos los rostros femeninos  haber si la encontraba la buscada resulto infructuosa y parecía que esa idea la había abandonado sin embargo solamente había pasado a segundo plano, donde como fantasía inconsciente, se convirtió en la fuerza dominante de Jonny. La amplitud y la intensidad de esta fantasía inconsciente estaban también reflejadas en otra defensa que Jonny necesitaba para hacer frente a un miedo al infanticidio.

Jonny interpreto  su separación tanto de sus padres biológicos como de los adoptivos como un abandono,  y  lo equiparo como un acto de violencia. El odio hacia el mismo era tan intenso que lo llevo a golpearse por las noches  practicas que reanudo periódicamente  incluso siendo adulto, durante su infancia siempre provocaba el castigo el día de su cumple años y de esta forma ver negada la celebración planeada, su vida estaba dominada por fantasías y actos suicidas, buscaba continuamente el peligro. Años más tarde la terapeuta le convenció  su tendencia al suicidio reviso su comportamiento y recordó  por lo menos catorce incidentes diferentes  en los que había intentado suicidarse en los últimos años en su diario escribió “no  apetece matar a nadie más que a mí mismo”. El asesinato así mismo era un impulso irresistible. Posteriormente descubrió que tenía otro problema en no querer vivir en la realidad. Junto con el descubrimiento de que sus verdaderos padres lo habían abandonado trajo consigo sentimientos incontrolables de ultraje y   humillación, y la repentina sensación de no pertenecer a ningún sitio.

 A partir de ese momento decidió no llorar porque para él era signo de debilidad.  Posteriormente surgió otro problema Jonny robaba todos los días tenía un impulso irresistible por tomas cosas que no le pertenencia, cada robo que realizaba era desencadenado por un incidente  y que lo llenaba de ira y que el lo veía como humillación, según sus propias palabras robar era como una inyección en el brazo  o como beber alcohol, finalmente se le ayuda a encontrar las causas que le motivaban dicho acto. En la primera parte de análisis Jonny estaba a punto de convertirse en un violinista  profesional y decidió de repente cambiar de instrumento musical por un clarinete el cual también lo tocaba estupendamente bien. Rechazaba el éxito  por el rechazo de su madre.

Después de cinco años que ya no asistió al consultorio, se caso y trabajaba de mecánico, había abandonado la música. El escenario le había encendido nuevamente, había resuelto algunos de sus sentimientos y estaba mas consciente  por primera vez estuvo en tratamiento psicoanalítico  constante sin embargo no dejaba de tener sentimientos que devaluaban su imagen pero su lucha por vencer esta vez se hizo tan intensa que lo oposición inconsciente  requirió una forma nueva y comenzó hablar de mi pequeña señora hacha, para hacer presión en sus propósitos y poder lograrlos.

El grado de autodestructividad y autoderrota de Jonny  era una medida de intensidad de lucha por mantenerse vivo en condiciones así creadas, la señora hacha era otro intento desesperado por parte de su mente de permitirle sobrevivir.

Una importante tarea del tratamiento psicoanalítico fue la de permitir a Jonny  desarrollar un yo lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a la realidad del abandono de su madre y su absoluto rechazo, solo entonces pudo finalmente permitir que la fantasía saliera a la superficie para de esta forma comenzar a renunciar a ella.

La obsesión de una niña por casarse con su padre

Sobre las enfermedades neuróticas Freud llegó a la conclusión  de que el principal factor causante era el complejo de Edipo el deseo universal del hijo por casarse con su madre y matar a su padre. Fue un descubrimiento de la universalidad de esos deseos y sentimientos  fue una contribución incalculable para el entendimiento de la psique.

Cuando los niños se sienten queridos parecen tomarse la situación edipica con calma. Un complejo de Edipo patológico  puede representar un defensa contra el terror al infanticidio.

El caso de Janet confirma  la idea    de una respuesta a la violencia  además de un complejo de Edipo. Durante varios hubo que convencer a Janet que los padres y las madres no se casan con sus hijos. Janet era una niña adolescente  que fue enviada a tratamiento psicoanalítico porque según sus padres  tenían un comportamiento progresivo irracional  y su rival más inmediato  no era su madre  sino su hermana  Anne dos años mayor que ella . Janet no dudaba de que sus padres se odiaran mutuamente y de que su madre no tenía ningún interés sexual  por su padre  por lo tanto ella y su hermana tenían el camino libre. En un principio el factor más confuso de la fantasía  obsesiva de Janet era casarse con su padre era que no lo quería sino que lo odiaba, no solamente lo odiaba sino vivía diariamente aterrorizada por sus ataques abusivos, los cuales eran verbales hacia ella pero físicamente a su hermano.

Janet estuvo en tratamiento hasta que tuvo veintitantos años en que ella y su marido se mudaron a vivir a otro lugar y en todo ese tiempo el miedo congelo cualquier expresión de cariño hacia su padre, por lo tanto se concluye que la determinación de casarse con su padre era una defensa contra el terror que sentía.

Esto quedo clarificado más adelante cuando recordó haberse duchado con su padre en una ocasión  en que su pene erecto estaba junto a la altura de sus ojos a partir de ese momento se dio cuenta que la seducción desempeñaba un papel importante en la forma en que su padre se relacionaba con ella y era lo único que le proporcionaba una sensación de poder sobre él. La madre de Janet siempre estuvo enferma pero incluso aunque se encontrara bien la dejaba al cuidado de los criados, cuando algunos años Janet fue capaz de enfrentarse a sus sentimientos hacia ella dijo: “Tenía el corazón negro y no quiere a nadie” La violencia de su padre de su padre y su encanto seductor operaban en una atmósfera que ofrecía poca protección. Una depresión neurótica con su identidad oculta detrás de sentimientos de falta de valía. El terror  sin paliativos la había llevado al borde de la psicosis y se refugiaba en una depresión psicótica.

La madre de Janet dejaba en claro que había tenido una niña anormal porque siempre había algo raro en ella. Janet  se había dejado casi siempre al cuidado de la niñeras por lo tanto sus padres  eran desconocido y esto confirmaba que el problema no era congénito.

Como en la mayoría de los casos el autoengaño, el autoengaño servía como en el caso de Janet  para mantener la fantasía  de que su falta de valía había hecho que la odiaran  y quisieran destruirla y de que tan pronto que cambiaran la querrían, su propia imagen devaluada y su asunción de la responsabilidad de los sentimientos de sus padres, servían para camuflar la limitada capacidad de amar de los padres su esperanza de algún día ser querida estaba basada en la negación de la realidad de aquellos y de la validez de la propia percepción  de ella.  La lucha diaria con su hermana  que parecía remontarse a los comienzos del tiempo, se ponían trampas una a la otra, Janet no sabía decir si era ella la comenzaba los conflictos, únicamente que a menudo le echaba a ella la culpa. Tampoco admitía que sentía celos de Anne o que sabía que era la favorita de su padre.

De la misma forma que nunca preguntaba por las posibles causas de las iras constantes de su padre, aceptaba el silencio constante de su madre  ante los ataques abusivos de este.

Termino por desahogar su ira reprimida que la había mantenido paralizada quedo claro entonces que por muy duramente que criticara a sus padres, las dirección de su ataques se invertían irremediablemente  acababa insistiendo que era su falta de valía lo que hacía que ellos la odiaran  y ofrecía como prueba irrefutable la intolerable respuesta  homicida de ella a los sentimientos homicidas de sus padres.  

El tema de ocultar sus sentimientos prohibidos y de defenderse de sus padres fue solucionado con la creación  de lo que ella llamaba barniz afirmando “en mi familia, el barniz era esencial para mantenerme entera es como una gran campaña para gustar a todo el mundo y la forma de hacerlo es borrar mis cualidades es borrar mis cualidades, malas o buenas para que no hagan que a la gente no le gusten…. Si soy yo misma, nada saldrá bien el barniz me hace tolerable a mi misma y dentro de el pienso que soy perfecta y pura y no pienso en mi humanidad.  “el problema es que he llegado a un punto en que me doy cuenta del grosor del muro con el que me he rodeado, aunque siento el dolor del vacío interior.

El dolor del vacio interior la llevo en un momento determinado a jugar con las drogas, tenia pensamientos y deseos suicidas como están fácil estar muerta…”el problema es que no quiero admitir que siento emociones o que me importa alguien porque a nadie le importo, la búsqueda de la identidad de Janet parecía partir de la nada  comenzar por el hecho de la existencia, la visibilidad y la realidad, el ser humano y persona.

La fijación de su padre era de tales dimensiones que fue una suerte que pusiera tanto empeño en su resolución esto afecto a todas sus relaciones. Para entender el laberinto a través del cual intentaba encontrar su camino.

Durante los primeros años de su análisis, las fantasías sexuales sobre el, al ser desmenuzadas trataban invariablemente de establecer  su poder sobre el , problema de elegir entre Anne y ella se puso de manifiesto en su respuesta a la separación temporal de sus padres más adelante. Anne  estaba comprometida  daba la impresión que el premio era finalmente para Janet. En ese momento estaba aterrorizada de que la fantasía se pudiera realizar, durante todo ese tiempo se negó a ver a su padre y únicamente poco apoco consiguió salir de su obsesión.

El proceso que le permitió librarse de la antigua imagen de si misma por sus reacciones hacia sus padres, le permitió reconocer la identidad de su marido y separaría la destructiva imagen del padre.

Para sobrevivir creo la fantasía de que no existía, de que era invisible, e irreal, emprendió una campaña de auto denigración y autoderrrota y desarrolla un barniz destinado a ocultar su verdadera identidad tanto a si mismo como a los demás, su iniciación en el psicoanálisis la salvo de la psicosis y la hizo salir de su enfermedad ayudándola  a dar rienda suelta asu rabia homicida  y a enfrentarse a su fantasía. Pudo entonteces establecer su realidad como persona como ser humano y su identidad como mujer, aunque su matrimonio revivió su miedo de la violencia  de su padre que ella proyecto en su marido, su lucha persistente por curarse separar gradualmente uno de otro. Pudo desactivar el terror que sentía hacia el y abandonar la fantasía  de recibir de el una satisfacción sexual que la había defendido de ese miedo.

La persistencia de las fantasías infantiles en la edad adulta

El caso de Sandra  hija única la cual asistió a consulta  tenía más de veinte años. Tanto el carácter  como la temprana incidencia de la violencia que había experimentado con relación a sus padres, así como la clase de sentimientos amorosos  de estos habían de aparecer insuficientes  una defensa basada en una depresión neurótica  o psicótica, para proporcionarse una mínima sensación de seguridad se había refugiado en la esquizofrenia.

El tema principal en la vida de Sandra era el peligro  había comenzado en la intimidad familiar para irradiar luego hacia afuera  hasta abarcar el mundo entero. Casi todas las facetas de su personalidad reflejaban de algún modo la influencia, para hacer imposible la supervivencia  había proyectado el peligro en criaturas imaginarias y adoptado la fantasía de que era invisible. La fantasía se había convertido en una forma de vida para Sandra y la defendía de un terror siempre presente.  Esto inicio cuando tenía tres años y medio y sus padres habían adquirido una tienda de caramelo, dos años antes que ella naciera, su hermano que tenía cinco años había muerto y su madre la había revelado “ tu no habrías nacido si el no hubiera muerto” otro hecho importante en la vida de Sandra, su padre era un prospero comerciante pero en ese tiempo había quebrad, el tercer factor concernía a la propia Sandra, que había sido amamantada un año y a partir de entonces, según le había contado su madre con tristeza y resentimiento, vomitaba cada vez que veía los pechos de su madre.

Sandra era una joven de pequeña estatura  pero bien proporcionada que salvo las huellas de su enfermedad en su cara era muy atractiva, tenía muchos síntomas molestos y desconcertantes por ejemplo le costaba juzgar las distancias, también sobre el tiempo se le olvidaban los sucesos ocurridos.

 Sandra parecía no tener deseos sin embargo dijo que deseaba ser un pelota. No podía comprender porque se sentía trastornada, cuando decía que no había pasado nada parecía referirse a un principio  exclusivamente a su padre, al que describía cariñosamente como un hombre dulce, indefenso y pasivo.

Cuando empezó el tratamiento dijo que su padre era abstraído era porque pensaba en su hermano muerto y eso la asustaba a veces pensaba que estaba con él, creía que ella había nacido porque el había muerto y si ella muriera el naciera nuevamente, en realidad Sandra había vivido en una relación estrecha con los muertos. Estos asumían formas extrañas y eran muy peligras, eran sobras negras delgadas como papel, que le eran familiares Vivian en las rendijillas y en la hendiduras  y durante su infancia eran abundantes  en el pasillo oscuro que llevaba a la calle.

Sandra se consideraba una niña muy mala  antipática de mal genio. El silencio de Sandra acerca de las experiencias infantiles con su madre era la medida de su terror  el recuerdo más antigua que Sandra tenia de su madre era la de una figura de cartón  sonriente y brillante como un cuchillo. Sandra no tuvo nunca la menor duda de que su madre pudiera matarla. De la misma forma que estaba convencida de que su padre lo haría, porque él no sabría que era ella.

Siempre que su madre  salía a la calle para verla cruzar suponía que no lo hacía para protegerla sino con la esperanza de verla tirada en la calle aplastada bajo las ruedas de un coche, durante años Sandra se negó a comer la comida preparada por su madre, pensaba que su madre era una bruja.

Sandra experimentaba miedo a los edificios grandes tenia temor que se derrumbasen.

El hecho de que el terror de la primera infancia hubiera permanecido intacto se puede achacar tanto a su antigua intensidad como al de la idea de que se había hecho de la muerte en respuesta a la catatonia  de su padre. Como siempre había pensado que estaba muerto cuando estaba abstraída su muerte real no le elimino como fuente de terror.

 De la misma forma es estado agitado de su madre que tenía el aspecto de psicosis. Sandra continuo necesitando siendo adulta las mismas fantasías defensivas que había necesitado cuando era pequeña. Cuando fue capaz de adquirir que conocía tantos sus sentimientos como los de sus padres, y el hecho de experimentarlos de nuevo le permitió separar el presente del pasado, las fantasías que le habían defendido tanto de su miedo a ser asesinada por sus padres como del de matarlos ella en respuesta se terminaron.

El miedo la fantasía y la esperanza de ser amado  

Cuando contemplamos las fantasías aquí presentadas, no podemos dejar de sentirnos impresionados por la magnitud de la lucha de los pacientes por ganar el cariño de sus padres como principal defensa contra el miedo al infanticidio.

 De acuerdo con la intensidad de la violencia y del cariño y con la incidencia de los acontecimientos traumáticos  todos ellos tenían miedo en diverso grado  de que sus padres les mataran o de matar ellos a sus padres  y ponían todas sus esperanzas de seguir vivos en ser un día amados. La esperanza de ser amados mediante un complejo sistema de autoengaño y fantasía.

Es un homenaje tanto a la fortaleza de la psique como a la ayuda terapéutica  proporcionada por el tratamiento psicoanalítico el hecho de que pudiera superar unos obstáculos tan formidables y se enfrentara a su imagen despreciada.

Hacia una sociedad madura

Cuando consideramos el autoengaño y las fantasías con que los niños presentados se defendían de su miedo al infanticidio y mantenían su esperanza de ser finalmente amados, no podemos dejar de señalar  la similitud en todos los casos, recurrieron a la depresión, a la psicosis, a la esquizofrenia o a la homosexualidad y todos ellos participaban  de la misma lucha, creando un armazón psicológico  para que aumentara su sensación de seguridad.

Los tramas de la infancia de los padres los trasladaron a la paternidad, los sentimientos agresivos y violentos heredados de su infancia, ya fueran reprimidos o expresados, encontraban frecuentemente, un blanco perfecto en sus hijos.

La mayoría de la formas de enfermedad emocional son simples manifestaciones del funcionamiento de la mente bajo distintos grados de tensión.

Los valores de la sociedad y su capacidad para reconocer la importancia de la salud emocional, se está haciendo cada vez más evidente que la escuela puede ser el lugar donde el niño adquiera el juicio emocional que necesita para convertirse en un ser humano maduro y eficaz con capacidad para gozar de las relaciones importantes de su vida, incluida la paternidad, si los maestros fueran educados para desempeñar ese papel o los terapeutas profesionales  realizaran sesiones de terapia de grupo  como parte regular del programa de estudios  la escuela seria el centro natural para impartir lo que ahora se conoce como educación emocional .

El costo de esta inteligencia ha de llevar un cambio de prioridades, al exigencia publica de que los fondos destinados a la destrucción de seres humanos sean dedicados en su lugar al desarrollo de estos entonces podremos soñar con una sociedad donde los niños no necesiten consumirse en su autodesprecio  sino que disfruten de su verdadera identidad, con todos los beneficios  para la humanidad que automáticamente se derivaría de esa maduración de la sociedad.